Los plugins de WordPress: ¿cuántos y cuáles usar?
WordPress es una plataforma que te permite crear todo tipo de sitios web con facilidad. Una de sus ventajas es que tiene miles de plugins que te ayudan a añadir funciones extra a tu web, como tiendas online, formularios de contacto, galerías de fotos, etc.
Pero, ¿sabes cuántos y cuáles plugins debes usar en WordPress? ¿Conoces los efectos que tienen en el rendimiento, la velocidad y la seguridad de tu web? En este artículo te lo explicamos todo sobre los plugins de WordPress y cómo usarlos correctamente.
¿Qué son los plugins de WordPress y para qué sirven?
Los plugins de WordPress son fragmentos de código que se conectan a tu web y modifican o mejoran las funciones de WordPress. Son como extensiones que puedes instalar y desinstalar según tus necesidades.
Los plugins te permiten personalizar tu web sin tener que tocar el código original de WordPress. Así puedes añadir funciones que no vienen por defecto o cambiar el aspecto o el comportamiento de tu web.
Hay plugins para todo lo que puedas imaginar: desde crear una tienda online con WooCommerce, hasta hacer un sistema de reservas con Bookly, pasando por mostrar tu trabajo como fotógrafo con Envira Gallery.
También hay plugins que optimizan tu web por detrás: comprimen las imágenes con WPSmush, mejoran el rendimiento con W3 Total Cache o aumentan la seguridad con WordFence.
¿Cuántos plugins debes usar en WordPress?
No hay un número exacto de plugins que sea el ideal o el recomendado para WordPress. Depende de cada web y de cada caso. Lo que sí hay son algunas pautas generales que te pueden orientar:
- No uses más plugins de los necesarios. Instalar muchos plugins puede afectar negativamente al rendimiento, la velocidad y la seguridad de tu web. Cada plugin añade código extra que se ejecuta en el servidor y en el navegador, lo que consume recursos y tiempo. Además, puede haber problemas de compatibilidad o conflictos entre los plugins o con el tema, lo que puede causar errores o mal funcionamiento. Y algunos plugins pueden estar desactualizados o tener fallos de seguridad, lo que facilita el acceso no autorizado a tu web o la inyección de código malicioso.
- Usa solo plugins de calidad. Elige bien los plugins que vas a instalar, revisando su reputación, sus valoraciones, sus comentarios, su fecha de actualización y su compatibilidad con tu versión de WordPress. Evita los plugins desconocidos, obsoletos o con malas críticas.
- Configura correctamente los plugins que uses. Ajusta las opciones de los plugins para que funcionen de forma eficiente y no consuman recursos innecesarios. Por ejemplo, usa un plugin de caché para reducir las peticiones al servidor, un plugin de optimización de imágenes para reducir su tamaño o un plugin de minificación para comprimir los archivos CSS y JS.
- Desinstala los plugins que no uses o que sean redundantes. Mantén los plugins actualizados para evitar problemas. Usa un plugin gestor de código o crea tu propio plugin personalizado para alojar tus fragmentos de código en lugar de usar el functions.php del tema.
En general, se puede decir que no debes usar más de 12-15 plugins en WordPress. Con esa cantidad podrás cubrir casi todas las necesidades de tu web. Según las estadísticas de WPBeginner, los editores de sitios web usan entre 20 y 30 plugins de WordPress, pero eso no significa que sea lo mejor ni lo más conveniente.
Lo importante es que tu web funcione bien, sea segura y ofrezca una buena experiencia a tus visitantes.
¿Cuándo usar plugins y cuándo editar el functions.php?
Otra cuestión que puede surgir es cuándo usar plugins y cuándo editar el functions.php del tema. El archivo functions.php del tema contiene las instrucciones para preparar la plantilla según lo que queramos mostrar. Es decir, podemos añadir o eliminar áreas de widgets, barras laterales o menús, recolocar u ocultar elementos como la información de un post, el título o la imagen, modificar el comportamiento o el diseño de algún elemento del tema, etc.
Todas las funciones que añadimos en este archivo deben ser relativas al tema que se está usando, ya que al cambiarlo se perderán. Por eso es una buena práctica crear un tema hijo y usar su archivo functions.php para hacer los ajustes.
Sin embargo, hay muchas funciones que son independientes del tema y que se aconseja añadir en un plugin. Así se evita sobrecargar el functions.php y se mantiene un orden lógico.
La regla general es la siguiente:
- Si la función afecta o está relacionada con el tema, entonces irá mejor en el functions.php
- Si la función está relacionada con funcionalidades generales de WordPress, entonces irá mejor en un plugin
Algunos ejemplos de funciones que podrías añadir en un plugin son:
- Mejorar el SEO, la seguridad o la optimización de tu web
- Crear una tienda online, un sistema de reservas, una galería de fotos, etc.
- Proteger el acceso al administrador, desactivar el editor de archivos o cambiar el prefijo de las tablas
Conclusión
Los plugins son una herramienta muy útil para mejorar tu web WordPress, pero también pueden causar problemas si se abusa de ellos. Por eso, es importante usarlos con criterio y sentido común.
Recuerda que la calidad es más importante que la cantidad y que no hay un número mágico de plugins que debas instalar. Lo importante es que tu web funcione bien, sea segura y ofrezca una buena experiencia a tus visitantes.
Esperamos que este artículo te haya ayudado a entender cómo usar los plugins de WordPress correctamente.
Si tienes alguna duda o comentario sobre este tema, no dudes en dejarnos un mensaje.